Principito y la Rosa

“Será necesario que soportes dos o tres orugas si quieres conocer las mariposas”

“Si alguien ama una flor, de la que sólo crece una sola en todos los millones y millones de estrellas, es suficiente para hacerle feliz con sólo mirar las estrellas. Puede decirse a sí mismo, «En algún lugar, mi flor está ahí… Pero si la oveja se come la flor, en un momento todas sus estrellas se oscurecerán… ¡Y tú crees que eso no es importante!”

“¡Y ningún adulto entenderá nunca que este es un asunto de tanta importancia!”

“Puede que haya millones de rosas en todo el mundo, pero tú eres mi única y exclusiva rosa”

“Me dije a mí mismo, otra vez: «Lo que más me conmueve de este principito que duerme aquí es su lealtad a una flor, la imagen de una rosa que brilla en todo su ser como la llama de una lámpara, incluso cuando está dormido…» Y lo sentí más frágil aún. Sentí la necesidad de protegerlo, como si él mismo fuera una llama que pudiera apagarse por una pequeña ráfaga de viento…”

“Mi flor es efímera», se dijo el principito, «y sólo tiene cuatro espinas para defenderse del mundo». ¡Y la he dejado en mi planeta, completamente sola!”

““. . . Uno ve claramente sólo con el corazón. Todo lo esencial es invisible a los ojos. . . . . Es el tiempo que pasas con tu rosa lo que hace que tu rosa sea tan importante. . . . Te haces responsable de lo que has domesticado. Eres responsable de tu rosa. . . .””

“Puede que haya millones de rosas en todo el mundo, pero tú eres mi única y exclusiva rosa.» –”

“Por supuesto que te amo», le dijo la flor. «Es mi culpa que no lo hayas sabido todo el tiempo. Eso no tiene importancia. Pero tú… has sido tan tonto como yo. Intenta ser feliz…”

“Nada desaparece hasta que nos enseña lo que necesitamos saber”