“Ahora, pues, pequeño hombre, huye por un momento de tus asuntos; escóndete por un momento de tus pensamientos turbulentos. Rompe ahora con tus molestas preocupaciones, y piensa menos en tus laboriosas ocupaciones. Dedica un poco de tiempo a Dios, y descansa un rato en Él. Entra en la cámara de tu mente, excluye todo lo que no sea Dios y lo que te ayude a buscarlo, y, cuando hayas cerrado la puerta, búscalo. Habla ahora, oh, todo mi corazón, habla ahora a Dios: «Busco tu rostro; tu rostro, Señor, deseo».”
0 vistas
0 likes
San Anselmo de Canterbury
Filósofo
26 frases
Frases Relacionadas
“Oh Señor, Dios nuestro, concédenos la gracia de desearte con todo nuestro corazón; que, deseando así, te busquemos, y buscando te encontremos; y así, encontrándote, te amemos; y amándote, odiemos aquellos pecados de los que nos has redimido.”
“La deuda era tan grande, que mientras el hombre solo la debía, sólo Dios podía pagarla.”
“Dios no se demora en escuchar nuestras oraciones porque no tenga intención de concederlas; sino para que, ampliando nuestros deseos, nos conceda más ampliamente».”